Confianza en el trabajo

Publicado el 27 de febrero de 2011 en Historias de la ciencia por omalaled
Tiempo aproximado de lectura: 3 minutos y 14 segundos

Copio, traduzco y pego una historia (catalán) que me ha encantado del blog de mi amigo Dan. Había leído algo sobre el tema, pero nunca tan bien explicado. Os dejo en manos de Dan.

Cuando en el laboratorio hemos de hacer un experimento, lo primero que hay que hacer es tener delante el protocolo de trabajo. La hoja donde pone exactamente lo que hay que hacer en cada paso y en qué orden hacerlo. Como queremos que siempre salga lo mismo, en teoría ha de estar anotado absolutamente todo. Cantidades, origen de los productos, temperaturas, tiempo y cualquier otra cosa que se os pase por la cabeza. En el laboratorio un protocolo nunca es demasiado detallado.

Pero une vez estaba haciendo una visita a otro laboratorio y me topé con un protocolo que siempre he recordado. Servía para preparar anticuerpos monoclonales. Los detalles no vienen al caso, pero en la lista de material había los reactivos, las células, los útiles de laboratorio y en la última línea, como una instrucción más, ponía que también hacía falta «¡confianza en el trabajo que haces!».

Parece una tontería, pero creo que es absolutamente acertado. Primero, para vivir más tranquilo (¡que no es poco!). Pero además, esta actitud ha ayudado a ganar un Premio Nobel.

A finales del siglo XIX, un físico llamado John James Strutt, pero que todo el mundo conoce como Lord Rayleigh, estaba trabajando en el cálculo de la densidad de los diferentes gases. Hoy basta con buscar una tabla en un libro o Internet, pero hace un siglo era un problema que había que resolver. Lo que hacía Lord Rayleigh era obtener el gas purificado de dos o tres fuentes diferentes y calcular la densidad en cada caso. Era una manera de asegurarse que había purificado completamente el gas y le fue muy bien con el oxígeno y el hidrógeno. Pero con el nitrógeno las cosas se complicaron.

Inicialmente calculó la densidad del nitrógeno a partir del aire. Lo que hacía era elimina completamente el oxígeno y el CO2 para dejar sólo el nitrógeno. Por otra parte, también lo hacía añadiendo amoníaco (NH3) y eliminando también el hidrógeno. De nuevo, se quedaría con más nitrógeno. Pero cuando calculaba la densidad encontraba que era ligeramente diferente en un caso y otro.

Había un 0.1% de diferencia.

Sinceramente, si a mí me sale un resultado que se aparta sólo un 0,1% de lo esperado descorcho una botella de cava y lo celebro. Normalmente hay errores que no puedes evitar y que hacen que errores parecidos sean habituales. Es la diferencia entre la teoría y la vid real. Por tanto, no habría dado mayor importancia y habría dado el resultado por correcto, añadiendo que el valor tenía un 0,1% de variación.

Pero Lord Rayleigh era meticuloso y repitió el experimento muchas veces. Y aquel impertinente 0,1% aparecía siempre. Y siempre en el caso del nitrógeno del aire. De hecho, siguió probando con nitrógeno obtenido de diferentes fuentes y siempre había una diferencia. El nitrógeno del aire era más denso que ningún otro. De hecho, todos los demás eran exactamente iguales.

Después de muchos intentos infructuosos para encontrar una explicación presentó el problema en un artículo, para ver si alguien le ayudaba a sacar algo en claro. Y un año después recibió un mensaje de un químico, William Ramsay, quien le propuso hacer algunas pruebas con un enfoque diferente. Ramsay, en lugar de intentar eliminar todo menos el nitrógeno lo hizo al revés. Tomó el nitrógeno que sacaba de quicio a Rayleigh y lo hizo reaccionar, primero con magnesio, y en otro experimento con oxígeno. En ambos casos podía eliminar el producto obtenido, pero siempre le quedaba una pequeña parte del gas que no reaccionaba. Dedujo que en el aire había un nuevo elemento, diferente del nitrógeno y todavía menos reactivo. Como en apariencia estaba en la atmósfera sin reaccionar ni hacer nada, aparte de desconcertar a los químicos, bautizaron el nuevo elemento con el nombre de argón (del griego argós, inactivo). Aquel fue el primer gas noble que se purificó y uno de los motivos que hizo ganar el Nobel a ambos. Curiosamente, Ramsay ganó el de química y Rayleigh el de física.

Pero al final, si lo ganaron y si descubrieron la existencia del argón fue simplemente porque Rayleigh tenía auténtica confianza en su trabajo, ¡y un error del 0,1% le parecía inaceptable!



Hay 15 comentarios a 'Confianza en el trabajo'

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  1. #1.- Enviado por: pasandoporaqui

    El día 27 de febrero de 2011 a las 18:58

    A mi estas cosas tambien me alucinan (sobre todo en aquella epoca). Algunos trabajamos en campos en los que si obtienes un resultado dentro de un factor 2 de lo esperado ya nos damos por contentos 🙂

  2. #2.- Enviado por: Javier

    El día 27 de febrero de 2011 a las 21:50

    Saludos. Querría publicar este texto en mi blog, me parece interesante, emocionante e inspirador. Además me apetece recomendar tu blog para los profes de ciencias, porque a menudo mandan trabajos sobre científicos o descubrimientos y este es un sitio estupendo para consultar estas cosas. Te parece bien? Saludos

    Javier

  3. #3.- Enviado por: Panta

    El día 27 de febrero de 2011 a las 23:06

    Buenísimo, lo comentaré cuando tenga que explicar los gases nobles.
    Saludos

  4. #4.- Enviado por: Proximo

    El día 28 de febrero de 2011 a las 09:42

    Es que Dan es un crack. Hay que recoger firmas a ver si le hacen un hueco en la tele. Mismo horario que Salvame o Gran Hermano. Tal vez asi…

  5. #5.- Enviado por: omalaled

    El día 28 de febrero de 2011 a las 10:34

    pasandoporaqui: a mí me parece impresionante esa cabezonería para que las cisas cuadren. Para mí es un absoluto rigor científico.
    Javier: encantado. Me parece perfecto. Para mí es un honor.
    Panta: lo mismo digo: encantado. Si hablas de gases nobles, también puedes explicarlse que el helio se encontró antes en el Sol que en la Tierra gracias a la espectroscopía.
    Proximo: he tenido la oportunidad de conocer a Dan personalmente y un día quedamos a comer. Y es un crack. Definitivamente.

    Salud!

  6. #6.- Enviado por: Edna Krabappel

    El día 1 de marzo de 2011 a las 12:19

    Caprotocolontidades: A Cantidades le sobra un protocolo.

  7. #7.- Enviado por: omalaled

    El día 1 de marzo de 2011 a las 14:25

    Edna: corregido. Muchas gracias.

    Salud!

  8. #8.- Enviado por: Ahskar

    El día 6 de marzo de 2011 a las 22:01

    Genial historia desde luego… Cuantas veces en ciencia se crea la obsesión de comprobar positivamente algo, olvidando que los resultados negativos o inesperados pueden enseñarnos tanto o más.

  9. #9.- Enviado por: omalaled

    El día 7 de marzo de 2011 a las 09:24

    Ahskar: cuando veo este tipo de cabezonería (en el sentido positivo de la palabra) nunca puedo olvidar a Einstein y Bohr discutiendo sobre los principios de la física cuántica. Su debate duró más de 20 años y Bohr siempre, en lugar de echar en cara a Einstein que se equivocaba, siempre se decía que sus comentarios eran muy agudos porque tocaban los principios básicos de la teoría, y que tenía que pensar y replantear una vez más todos los principios cada vez que discutía con él. Estoy seguro que conocerás el experimento mental del fotón en la caja con el reloj 🙂 … Si no lo conoces, me lo dices y le dedico un post.

    Salud!

  10. #10.- Enviado por: Haplo

    El día 11 de marzo de 2011 a las 11:46

    Pues Ahskar no sé si lo conocerá, pero seguro que yo no 🙂 , así que ya puedes ir preparándo ese artículo…

    En el sector que yo trabajo, si saco un resultado con una diferencia del 0.1%, me hacen el jefe 🙂

  11. #11.- Enviado por: omalaled

    El día 11 de marzo de 2011 a las 12:51

    Haplo: OK, lo prepararé 🙂

    Salud!

  12. #12.- Enviado por: TOMAS NOMAS

    El día 20 de marzo de 2011 a las 01:25

    Excelente artículo como todos los que aquí he leído en estos días.

    Saludos Cordiales

    Tomás Nomás

  13. #13.- Enviado por: Benjita

    El día 24 de marzo de 2011 a las 14:23

    Saludos.

    Llegue a su página por el enlace de Google a Houdini, y este me llevo a la wikipedia de él, de ahi un enlace me llevo a Jasper Maskelyne, mago ingles, y en su wiki encontre un enlace a un post de ud sobre él, asi que, aqui me tiene saludandole como un nuevo lector 🙂

  14. #14.- Enviado por: omalaled

    El día 24 de marzo de 2011 a las 19:54

    Benjita: muchas gracias. Bienvenido.

    Salud!

  15. #15.- Enviado por: Amanita

    El día 28 de enero de 2012 a las 01:33

    Encontre su página un día en la playa viendo la arena moverse de tal manera que me recordó el movimiento browniano. Llevaba ya siete meses de graduada y quería refrescar mi memoria al respecto y encontre su articulo sobre ello. Esto es mi pasatiempos ahora! Felicidades y este articulo me recordó tanto jaja me fascino de los mejores!

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