Anatomía del fraude científico
El 22 de marzo, en el New York Times se podía leer un artículo titulado: «Bióloga paga caro haber cuestionado un estudio». Dicho artículo hacía referencia a una becaria de biología llamada Margot O’Toole que había puesto en duda un trabajo salido del MIT y publicado en la revista Cell. Uno de los principales autores del artículo era un tal David Baltimore, rector de la Universidad Rockefeller, en Nueva York. Con él firmaba Thereza Imanishi-Kari, directora del pequeño laboratorio del MIT donde Margot O’Toole trabajaba merced a una beca anual.