Libros y más libros
Me dice delirium en un comentario en el artículo anterior que le gustaría una lista de 10 libros para recomendar estas fechas y que muchos estaríais muy agradecidos ¿Cómo puedo resistirme a una tentación así? También recuerdo que Remo nos brindaba algo parecido cada final de año. Por cierto: ¡Remo!, ¿dónde estás? ¡haznos una señal! Hemos de recuperar las buenas costumbres o hacer similares. Así que ahí va. Algunos los comentaré en futuros artículos con más detalle.
Antes de empezar quiero decir algo a todos los que no tenéis la costumbre de leer. Os invito a que os forcéis a leer 10 páginas al día de un libro. Cualquiera. El que más rabia os dé. Sólo os pido un cuarto de hora al día para que os relajéis en el sofá de vuestras casas y disfrutéis de la lectura. Pensad que sólo con esto, que parece una nimiedad, en un mes os habréis tragado un libro de 300 páginas. Si vais en tren o metro, aprovechad el tiempo con un libro; si llegáis a casa, no encendáis la TV: coged un libro y leed vuestras 10 páginas. Aprovechad las fiestas para ello. Y ahora, vamos con el listado.
1.- Deconstruyendo a Darwin, Javier Sampedro. Es una discrepancia de la selección natural como objeto en la Teoría de la Evolución. Para ello, da argumentos desde el punto de vista genético. Afirma que hubo momentos en que hubo «saltos» evolutivos en los que la selección natural no pintaba nada y la causa era por cómo son los genes. Así que explica muchas curiosidades sobre ellos. Por momentos se hace algo duro para los aficionados como un servidor, pero aun así es muy recomendable. Leed la reseña que hace PaleoFreak.
2.- Antes de Hiroshima, Diana Preston. Una gozada, una maravilla, alucinante. Para que os hagáis una idea; normalmente, anoto las páginas donde encuentro algo interesante en una hoja. Pues me he hartado de apuntar páginas y páginas. Salpicado de curiosidades sobre la historia de la ciencia (y otras cosas) y sus personajes; todo relacionado con la bomba atómica. Para todos los públicos.
3.- Libros de Stephen Jay Gould. Veamos, el estilo de Gould es muy difícil de definir. Es de aquellos que te gusta o no te gusta. Por momentos lo encuentro genial, en otros pienso que no dice más que tonterías y por momentos le tiraría los trastos a la cabeza. Eso sí, todo con un fondo de ciencia y una cultura tremenda. Por supuesto, leeré todos los libros de él que caigan en mis manos, pero nunca los utilizaría como regalo a alguien. Por todo ello, recomiendo leer un buen rato sus libros antes de comprar uno. Puedo hablar de El pulgar del panda, Ciencia vs. religión, Las piedras falaces de Marrakech, «Brontosaurus» y la nalga del ministro. No recuerdo si he leído algún otro más.
4.- Historia de las cosas, Pancracio Celdrán; Las cosas nuestras de cada día, Charles Panati. Ambos libros son muy parecidos y tienen un estilo muy similar. Ambos narran diferentes inventos que llenan nuestra vida diaria en capítulos cortos. Desde la tostadora hasta la lavadora, desde el preservativo hasta los laxantes, desde la bañera hasta las transfusiones de sangre. Muy parecidos, también, en estilo. Ninguno de ellos cita bibliografía alguna (en eso, también se parecen). Es mi única pega. Por lo demás, muy curiosos.
5.- La guerra de dos mundos, Sergio Palacios. El autor es un apasionado de la ciencia ficción y toma las películas de este género para hacernos notar lo lejos que están de la realidad y aprovechar para explicarnos curiosidades de la física. Para seguir bien el libro, al que él mismo hace referencia en su blog, en mi opinión, hay que tener claros los conocimientos de COU (no sé cómo se llama hoy día); me refiero a tener claros conceptos como cantidad de movimiento, energía potencial y cinética y cosas así. Si esos conceptos los tenéis claros, el libro es muy bueno, ameno y bastante divertido en muchos momentos; con un estilo muy similar al del blog malaciencia (al que también cita). Sólo he de hacerle una crítica: aunque en la contraportada dice que sólo aparece una ecuación, la verdad es que, aunque no aparezcan otras, las dice con letras (por ejemplo, la energía cinética es la mitad de la masa por el cuadrado de la velocidad; claro, la fórmula no está, pero sí está escrita).
6.- Los códigos secretos, Simon Singh. Otro libro imprescindible. Buenísimo. Narra la historia de la criptografía y el criptoanálisis explicando sus diferentes épocas y cómo ha variado a lo largo de la historia. Habla con detalle del funcionamiento de la máquina Enigma y, entonces, uno se da cuenta de lo geniales que eran esos tipos como Turing. Hasta explica cómo Churchill se quedó de impresionado cuando fue a conocerlos (prometo explicarlo en otra historia). Ese libro da tranquilamente para 5 o 6 artículos. La parte de criptografía cuántica es algo compleja, pero no importa, pues ese capítulo es corto. De este mismo autor puedo citar también El último teorema de Fermat, donde se habla de la historia de las matemáticas siempre teniendo como centro este teorema. A mí me encantó también, pero hay un lector al que no tanto.
7.- El hombre que calumnió a los monos, Miguel Ángel Sabadell. Es un libro de capítulos cortos, plagado de anécdotas de la historia de la ciencia y con una parte final sobre la pseudociencia. Muchos detalles de este blog han salido de este libro. Muy entretenido y apto para todos los públicos.
8.- El espejismo de Dios, Richard Dawkins. Hay que leer este libro. Puede que no coincida al 100% en sus opiniones, pero se trata de una serie de argumentaciones sobre las religiones desde el punto de vista del ateo. Y lo hace con una lógica aplastante, muy difícil de rebatir. Si no eres creyente, te encantará; y si lo eres, te dará para pensar y meditar sobre tus creencias; por ello, es recomendable para todo el mundo. De este autor conozco también El gen egoísta, donde afirma que la selección natural no se da en los seres vivos, sino en los genes. Vamos, que la vida no es más que el mejor medio que tienen los genes para perpetuarse. (Stephen Jay Gould, en uno de sus libros dice que se horrorizó cuando supo de esta idea).
9.- El científico curioso, Francisco Mora. Nuestros pensamientos, moral, recuerdos, comportamiento, consciencia, etc.; todo, absolutamente todo, está grabado físicamente en nuestro cerebro; el órgano más complejo conocido cambia físicamente en el tiempo al igual que nuestros cuerpos. Este libro nos descubre muchos detalles en capítulos de apenas dos páginas. Magnífico, interesante, entretenido.
10.- ¡Bang! La historia completa del Universo, Brian May, Patrick Moore y Chris Lintott. Este libro lo leí porque uno de sus autores es Brian May. ¿Os suena? quizás os suene más si os digo que es el guitarrista de Queen. Dejó la física cuando se unió al grupo, pero en 2006 culminó su ¡doctorado en ciencias físicas!. Es un gran aficionado a la astronomía. El libro es precioso, con fotos espectaculares. Da una introducción a la cosmología muy sencilla y accesible a todo el mundo. La verdad es que he quedado gratamente sorprendido.
11.- La melodía secreta, Trinh Xuan Thuan. De lo mejorcito en cosmología que he leído últimamente. Tiene un nivel más alto que el anterior, así que no lo recomiendo para quienes desconozcan totalmente la materia. No obstante, con los conocimientos mínimos necesarios (pongamos primero de Universidad), es muy bueno. Habla de la estructura del Universo; de cómo se miden sus distancias y edades; de cómo acabará: si cerrado con Big Crunch o abierto donde quedarían tan sólo neutrinos y fotones.
12.- Lo que queda por descubrir, John Maddox. El autor fue el director durante 22 años de la revista Nature y en este libro nos pone al día de cómo está la ciencia en sus diferentes campos y qué es lo que se prevé que serán las próximas líneas a seguir. Es un libro que, de haber una hecatombe y quedara un ejemplar, quien lo leyera sabría cómo se encontraba la ciencia a principios del siglo XXI. Es un libro más bien técnico pero con un nivel accesible a todos.
13.- Y ya sé que los he recomendado muchísimas veces, pero siempre diré que son imprescindibles: los clásicos Está Ud. de broma, Sr. Feynman y ¿Qué te importa lo que piensen los demás? Libros para divertirse, aprender, disfrutar leyendo y ver cómo se vive la vida desde el punto de vista de un personaje apasionante como fue Richard Feynman. Son libros que «enganchan» a la lectura, y de esos que recomendaría para lo de empezar a leer 10 páginas diarias.
14.- Carl Sagan. ¿Qué puedo decir de Carl Sagan que no se haya dicho ya? El mundo y sus demonios, Miles de millones, La diversidad de la ciencia; etc. Todos son buenos. Carl Sagan siempre tuvo en mente la existencia o no de vida en otros planetas, de OVNIS y cómo no: de Dios. Su escepticismo se refleja en todos sus libros con mucha intensidad. Como habla él mejor que yo, os copio unos párrafos de Miles de millones, que ya puse en un comentario, para que vayáis haciendo boca. Finalizo este post con ellos.
Me gustaría creer que cuando muera seguiré viviendo, que alguna parte de mí continuará pensando, sintiendo y recordando. Sin embargo, a pesar de lo mucho que quisiera creerlo y de las antiguas tradiciones culturales de todo el mundo que afirman la existencia de otra vida, nada me indica que tal aseveración pueda ser algo más que un anhelo.
Deseo realmente envejecer junto a Annie, mi mujer, a quien tanto quiero. Deseo ver crecer a mis hijos pequeños y desempeñar un papel en el desarrollo de su carácter y de su intelecto. Deseo conocer a nietos todavía no concebidos. Hay problemas científicos de cuyo desenlace ansío ser testigo, como la exploración de muchos de los mundos de nuestro sistema solar y la búsqueda de vida fuera de nuestro planeta. Deseo saber cómo se desenvolverán algunas grandes tendencias de la historia humana, tanto esperanzadoras como inquietantes: los peligros y promesas de nuestra tecnología, por ejemplo, la emancipación de las mujeres, la creciente ascensión política, económica y tecnológica de China, el vuelo interestelar.
De haber otra vida, fuera cual fuere el momento de mi muerte, podría satisfacer la mayor parte de estos deseos y anhelos, pero si la muerte es sólo dormir, sin soñar ni despertar, se trata de una vana esperanza. Tal vez esta perspectiva me haya proporcionado una pequeña motivación adicional para seguir con vida. El mundo es tan exquisito, posee tanto amor y tal hondura moral, que no hay motivo para engañarnos con bellas historias respaldadas por escasas evidencias. Me parece mucho mejor mirar cara a cara la Muerte en nuestra vulnerabilidad y agradecer cada día las oportunidades breves y magníficas que brinda la vida.
Y si habéis llegado hasta aquí, las líneas de Ann Druyan, su mujer:
— Esto es un velatorio —me dijo serenamente Carl—. Voy a morir.
— No —protesté—. Lo superarás como ya hiciste antes, cuando parecía que no quedaban esperanzas.Se volvió hacia mí con el mismo gesto que yo había contemplado incontables veces en las discusiones y escaramuzas de nuestros 20 años de escribir juntos y de amor apasionado. Con una mezcla de buen humor y escepticismo, pero, como siempre, sin vestigio de autocompasión, repuso escuetamente:
— Bueno, veremos quién tiene razón ahora.
Sam, de cinco años ya, fue a ver a su padre por última vez. Aunque Carl luchaba por respirar y le costaba hablar, consiguió sobreponerse para no asustar al menor de sus hijos.
— Te quiero, Sam —fue todo lo que logró musitar.
— Yo también te quiero, papá —dijo Sam con tono solemne.Desmintiendo las fantasías de los integristas, no hubo conversión en el lecho de muerte, ni en el último minuto se refugió en la visión consoladora de un cielo o de otra vida. Para Carl, sólo importaba lo cierto, no aquello que sólo sirviera para sentirnos mejor. Incluso en el momento en que puede perdonarse a cualquiera que se aparte de la realidad de la situación, Carl se mostró firme. Cuando nos miramos fijamente a los ojos, fue con la convicción compartida de que nuestra maravillosa vida en común acababa para siempre.
Impresionante, ¿verdad?
El día 6 de diciembre de 2008 a las 17:18
¡Bang! me lo saqué yo de la biblioteca pensnado que sería un libro mediocre que aprovechaba la fama de Brian May, y la verdad es que también me sorprendió mucho.
Ya que te piden recomendaciones, voy a hacer lo mismo, si no te importa. ¿Has leído algo de Ilya Prigogine? Nos lo recomendó un profesor a la clase, pero sólo dijo que si encontrábamos cualquier cosa suya, que la compráramos y la leyéramos. El problema es que he encontrado uno (Las leyes del Caos), pero un poco caro para el bolsillo de un estudiante, sobre todo para las escasas 150 páginas que tiene, así que antes de nada, quería preguntar a un experto en estos temas como tú.
El día 6 de diciembre de 2008 a las 20:39
Que el trabajo y recuerdo de una persona perdure para siempre, creo yo, que es conseguir que su alma sea inmortal. Por eso no cabe duda, que Carl Sagan vivirá eternamente.
Un saludo….
El día 6 de diciembre de 2008 a las 21:35
No por favor… no. Que tengo la pila de libros amenzando con desplazarse peligrosamente de su centro de gravedad. Menos mal que algunos ya los tengo leído, así que ya adelanté algo de los deberes para las vacaciones de navidad.
😉
El día 7 de diciembre de 2008 a las 05:10
Gracias por las recomendaciones Omalaled.
Tengo en mente pillarme «Lo que queda por descubrir», John Maddox, Deconstruyendo a Darwin, Javier Sampedro, y tal vez alguno más de Feynman. Del resto de recomendaciones ya tengo algunos libros, o por lo menos libros semejantes que hagan que no este tan perdido en los temas que tratan.
Veo que hay varios libros de «historia de la ciencia», pero curiosamente ninguno de «ciencia de la historia», no me refiero a libros de historia (descriptiva) o de cultura, sino a algún libro que explique realmente las bases científicas de por qué la historia es como es a grandes rasgos, y no meramente como una sucesión de hechos unidos por la contingencia. Entre los pocos libros que satisfacen plenamente ese criterio se encuentra «Armas, gérmenes y acero.» del biólogo Jared Diamond, y lo recomiendo 100%. Básicamente lo que hace es explicar gran parte de la historia humana basándose en variables biológicas, geográficas y demográficas, para a partir de ello explicar fenómenos como las diferencias entre culturas, los avances tecnológicos, etc.
http://es.wikipedia.org/wiki/Armas,_gérmenes_y_acero
Si sois demasiado flojos para comprarlo de seguro debe andar el ebook por internet (pero la versión en inglés), en español sólo encontré un libro posterior del mismo autor, «Por Que Algunas Sociedades Perduran Y Otras Desaparecen»:
http://www.bibliotheka.org/?/ver/43126
El día 7 de diciembre de 2008 a las 06:50
Uff, primero fue Feynman, ahora Carl Sagan, me revelas a cada científico, despiertas tanto mi curiosidad, que me termina faltando tiempo. Además, Feynman y ahora Sagan (cómo no enamorarse de los textos que pusiste aquí?) son difíciles de encontrar aquí, tanto que aún no encuentro ninguno de Feynman en español.
Si algún día logro ser científico, una parte de eso será culpa tuya y de tu blog. Un saludo
El día 7 de diciembre de 2008 a las 11:24
Recomiendo encarecidamente el libro de Miguel Angel Sabadell, q -además- es un buen tipo.
Sagan…Qué decir de él. El más grande divulgador científico de la historia, yo creo.
Todos los q crecimos viendo «Cosmos» nos emocionamos cuando leemos cosas sobre él.
Un consejo…El libro de Dawkins -el espejismo de Dios- es algo duro de leer, aviso. Es bueno, pero denso. Hay q cogerlo con ganas 😉
El día 7 de diciembre de 2008 a las 11:31
Otro buen regalo o autoregalo navideño podría ser la serie «Universe» de The History Channel; llevan dos temporadas y hace poco empezaron la tercera.
No sé si este ya a la venta en alguna parte, sino podéis buscar algún torrent –que es lo que he hecho yo–.
No es un libro pero yo creo que cuenta como uno. 😀
El día 7 de diciembre de 2008 a las 11:45
Kunzahe: no he leído nada de Ilya Prigogine. He tenido algún libro suyo en mis manos, pero no me acababa de convencer de buenas a primeras. No obstante, pediré ese que comentas y lo leeré.
Iñaki: Carl Sagan es un héroe en nuestra generación. Desgraciadamente, el paso del tiempo es ineludible para el olvido.
Isod: no tienes por qué leerlos todos 🙂 Simplemente, toma los que más te interesen.
Marfil: tomo nota de esos que dices.
Dicari: muchas gracias por el elogio. Tienes muchos libros descargables en los enlaces del panel derecho. En ellos (en particular, el bibliotheka) tienes casi todos los de Carl Sagan.
silencer: coincido contigo en que Miguel Angel Sabadell es un gran divulgador; no obstante, es un autor que tampoco cita casi nunca sus fuente; cosa que me hace bajar el listón de su categoría como tal. Respecto al libro de Dawkins, es denso un poco al principio; pero no me ha quedado esa percepción.
Salud!
El día 7 de diciembre de 2008 a las 18:10
Desde luego, Omalaled, cómo eres… Te piden una lista de diez libros, y tú nos das… ¡22! de catorce autores distintos.
Hala, a apuntarlos (tengo que reconocer que las recomendaciones tuyas que he seguido, comprando el libro y leyéndolo, nunca me han defraudado). ¡Qué pena que la Carta a los Reyes Magos ya la he escrito…!!
…Aunque este año ha sido fácil: «Por favor, no me traigáis más carbón. Gracias». A ver si hay suerte y no me traen más carbón.
Saludos
El día 7 de diciembre de 2008 a las 20:13
Marfil, mucho mejor que el de germenes, que me he leido del mismo autor Colapso y no me va mucho te recomiendo LIBROS – MATANZA Y CULTURA: BATALLAS DECISIVAS EN EL AUGE DE LA CIVILIZACION OCCIDENTAL
* Visita novedades de Historia universal. Obras generales y de referencia
MATANZA Y CULTURA: BATALLAS DECISIVAS EN EL AUGE DE LA CIVILIZACI ON OCCIDENTAL
de HANSON, VICTOR DAVIS
EDICIONES TURNER, S.L.
Muy Bueno (1) ¡Vota!
14.0×22.0 cm 550 pags
Lengua: CASTELLANO
Encuadernación: Tapa dura
ISBN: 9788475066370
Nº Edición:1ª
Año de edición:2004
Plaza edición: MADRID
El día 7 de diciembre de 2008 a las 20:15
Donde se explica que cosas como la democracia y la libertad de expresion y el capitalismo hacen mas mortiferos a los ejercitos occidentales.
El día 8 de diciembre de 2008 a las 00:47
Gracias por las pistas, Omalaled. Confieso mi carencia en Feynman, a ver si me pongo y lo descubro. Lo has recomendado tantas veces que apetece mucho. La verdad es que me recreo pensando en que voy a asomarme a un autor del que aún no tengo nada leído.
Espero no añadir quebraderos de cabeza en vuestras redacciones de cartas a los Reyes Magos, pero me atrevo a sugerir un libro que en su momento me impresionó mucho, y creo que encaja muy bien con los gustos de este blog. «La Medida de Todas las Cosas» de Ken Adler (Ed. Taurus) es un relato fascinante de cómo se llegó a la definición del metro como patrón de medida.
No sabría decir si es una novela, una biografía o un libro de divulgación. Tal vez no tenga sentido catalogarlo. Pero el modo en que nos cuenta la deriva científica y psicológica de sus protagonistas (retratados con una profundidad magistral), en un momento histórico tan apasionante como el que sigue a la Revolución Francesa y con un portentoso trabajo de documentación a la espalda hacen que se encuentre entre lo mejorcito que he leído en mucho tiempo.
Desde que he conocido esta historia miro las reglas graduadas con cierto cariño.
El día 8 de diciembre de 2008 a las 03:45
Nachop, el problema es que si «cosas como la democracia, la libertad de expresión y el capitalismo hacen mas mortiferos a los ejércitos occidentales», se está acudiendo a causas inmediatas y específicas en vez de a causas generales, porque entonces podemos preguntar ¿por qué surgió el capitalismo y la forma de Estado-nación primero en occidente y no en Nueva Guinea?. Es esa la pregunta que se hace Jared Diamond y que yo considero hace la diferencia entre la «historia descriptiva» y la «explicación científica de la historia». Otro punto importante que señala Diamond es que la supremacía occidental no puede ser atribuida simplemente a «batallas decisivas», sino que estamos hablando de un resultado mucho más depurado y rotundo, el desarrollo de las batallas pudo haber contribuido a detalles específicos (algunos muy importantes), pero lo realmente importante es la tendencia de la supremacía de occidente y es eso lo que hay explicar.
Con el libro de «Armas, gérmenes y acero» no se aprende en lo absoluto nada de historia, no aparecen nombres de reyes, batallas, etc. Sino sólo las causas geográficas y biológicas que determinaron los lugares más proclives a asentamientos humanos, un alto crecimiento demográfico que a su vez llevará a una diferenciación de trabajo, a jerarquías políticas, ejércitos organizados, mejores armas, resistencia a gérmenes, etc. Por otra parte tengo que reconocer que su validez tal vez pueda extenderse a lo mucho hasta el siglo XVI o XVII, que es cuando empiezan a aparecer cada vez más fenómenos que disminuyen el valor de las causas geográficas y biológicas para explicar el desarrollo de las distintas naciones. Tal vez el mejor ejemplo lo constituyan los Estados Unidos, un territorio que hasta la colonización inglesa no contó con ningún asentamiento humano de importancia, pero que una vez superadas las barreras geográficas gracias a la colonización inglesa eliminó las variables que en principio limitaban su desarrollo: La falta de varios animales domésticos, de cereales, de una estructura política jerarquizada, etc. Por supuesto todo esto se consiguió importando directamente lo conseguido en Europa al nuevo territorio, y con ello el análisis de Diamond empieza a perder valor explicativo. Pero no creo que sea culpa de su análisis, simplemente aparecen fenómenos emergentes cuando cualquier sistema crece lo suficiente. 😉
El día 8 de diciembre de 2008 a las 11:43
A mí me cuesta bastante esto de hacer listas, así que tuve la cara de pedirle una a Sergio, de Física en la ciencia ficción, para añadirla tal cual a la carta de los reyes magos. Con toda la suerte de que Sergio es buena gente, ha publicado un post con 10 libros de ciencia ficción para estas navidades.
http://fisicacf.blogspot.com/2008/12/algunas-lecturas-para-la-dulce-navidad.html
como no puedo esperar a las navidades, me he cogido en la biblioteca municipal Cita con Rama…
El día 8 de diciembre de 2008 a las 22:51
Muy bien las recomendaciones.
Como siempre añadiría o quitaría cosas de la lista, pero para gustos colores 🙂
Por otro lado sí que impresionan las palabras postreras de Sagan pero yo no hubiera hecho tanto ‘spoiler’, dejar un poco de miel en los labios y que la gente luego se preocupe de buscarlo y leer … 😉
Saludos
El día 8 de diciembre de 2008 a las 23:44
Marfil, de eso trata tambien el libro Matanza y Cultura, de que las batallas decisivas son ganadas por la cultura que hay detras… gracias a su cultura.
Un ejemplo clasico seria el de Hernan Cortes y los Aztecas. No fue solo la tecnologia, si no la forma de luchar buscando la batalla decisiva causando el maximo número de bajas. Los mexicas buscaban el «honor» de capturar prisioneros para luego ser sacrificados y luchaban de forma individual. Los conquistadores en formación cerrada (herederos de las falanges de hoplitas) que se basan en el «honor» de muere en tu sitio no el de capturar el que más prisioneros o el que hace mas bajas.
Así va desgranando unas cuantas batallas en cada una buscando el valor de la sociedad occidental que les hacia ganar. Otro ejemplo; el capitulo dedicado a lepanto se llama: «Lepanto o el capitalismo mata».
Vamos, que te lo recomiendo encarecidamente.
Del Dyamonds me lei (y tengo el libro que me lo compre) el de «Colapso» y me parecio muy flojo por lo cual no me atrevi con el de «germenes bla bla».
El capitalismo nacio en occidente por el respeto a la propiedad individual de los griegos (tambien lo cuenta en «matanza») eran ciudadanos, en cambio en oriente todo pertenecia al rey.
De verdad que te lo recomiendo ^^
El día 9 de diciembre de 2008 a las 12:00
Recién regresado de las vacaciones que me tomé, no sólo encuentro atendida mi petición, sino que además me encuentro enlazado en el post! Muerto de vergüenza, me he apresurado a publicar una historia relacionada con el libro de Jay Gould «Brontosaurus y la nalga del ministro», para tener algo interesante que ofrecer a la audiencia de tu blog.
Coincido con tu apreciación de los libros de este autor: en ocasiones lo encuentro insoportable, pedante y rebuscado. Pero al final reconoces que sabe tanto que te acaba fascinando.
Muchas gracias por el post, me apunto especialmente el de La guerra de dos mundos y Antes de Hiroshima. Un saludo también a los comentaristas de este blog, que siempre tienen algo interesante que aportar.
Y felices lecturas a todos!
El día 9 de diciembre de 2008 a las 13:48
A mi el de Los códigos secretos de Simon Singh me ENCANTO, lo compre cuando aun era miembro del Circulo de lectores y desde luego nunca me he arrepentido. Para los que gusten de la tecnología (de cifrado/encriptación) y matemáticas. Y con todo es sencillo y ameno de leer.
El día 9 de diciembre de 2008 a las 14:07
Creo que hay varias formas distintas de como los autores entienden sus libros; i) algunos buscan siempre que su libro más reciente sea a la vez una recapitulación del anterior, de modo que sus libros siempre apuntan a un ideal de «obra definitiva» (se me ocurre por ejemplo «Una breve historia de casi todo» de Bryson, o los libros académicos con varias ediciones); ii) otros buscan crear un conjunto de libros con una especie de libro central (que diría es el caso de Dawkins usando como centro «el gen egoísta», y de Diamond usando como centro «armas germenes y acero»), iii) otros entienden sus libros a cada uno como una obra independiente (yo colocaría aquí a Asimov, Sagan, y el caso extremo sería Gould, donde cada libro es de hecho una recopilación de ensayos independientes; algo curioso porque al final optó por todo lo contrario, haciendo de «la estructura de la evolución» un compendio como su obra definitiva), etc.
Mi punto es que siempre existe el riesgo de empezar a leer un autor por «el orden equivocado» 😉 , aveces pensamos que es mejor empezar en orden cronológico (lo peor si escoges a un autor tipo «en proceso de obra definitiva»), y otras veces pensamos que es mejor empezar en orden inverso (algo malo cuando se elige un autor con un libro central ya antiguo, como sería Dawkins o Dyamond). Dicho esto, no puedo estar seguro de recomendar el libro «el colapso» de Dyamond, porque es muy probable que precisamente haya evitado repetirse en todo lo que explica con detalle en «armas, gérmenes y acero», y es el tipo de autor que no busca crear una «obra definitiva», sino que esta contento con tener ya un pilar en «armas, germenes y acero» y hacer seguir creciendo la idea en otros libros sin repetirse y «empezar desde el principio» en cada uno de sus libros.
No voy a seguir diciendo por qué es un buen libro o no; a mi me encanta la historia, y creo que en general para sentirse interesado por la historia hay que tener un cierto regusto por los detalles. Pero creo que es un ejercicio más que necesario mirar el bosque desde lejos para contemplar las tendencias, y no cada árbol por separado, y por eso me parece de gran valor el libro de Dyamond.
Pd: La batalla de Cortés la menciona varias veces Dyamond y no atribuye la victoria sólo a la superioridad tecnológica, sino que añade más causas, con la diferencia de otros historiadores, de que en su caso son causas estructurales y no inmediatas. 😉
El día 9 de diciembre de 2008 a las 16:21
Olas!
Jajaja, excelente consejo, io leo un libro siempre ke voi en el camion (bueno, cuando no voi dormido de cansancio, jejeje) pero siempre llevo uno en mi mochila y cuando puedo, lo leo. Y como el trayecto del trabajo a la casa es mucho, pues leo como una hr y madia al dia (recordando, si no voi dormido 6^^)
Muy buena seleccion, a lo mejor pido uno de navidad xD
Felices fiestas! Cuidate! Byes!
El día 9 de diciembre de 2008 a las 20:54
Enhorabuena por el blog. No la considero una bitácora rival, sino, todo lo contrario, amiga.
Hay un libro de divulgación de la historia de la ciencia excelente y original, que recomiendo, y que todo el mundo debería leer. Se trata de «Cinco ecuaciones que cambiaron el mundo», de Michael Guillen (Ed. debate, 2003; creo que hay una edición de bolsillo posterior). Obra imprescindible que no puede defraudar.
Un sincero y cordial saludo.
Bernardo Rivero (http://devenirdelaciencia.blogspot.com/)
El día 11 de diciembre de 2008 a las 04:03
Estoy leyendo el espejismo de Dios, y a veces es grandioso y a veces parece un folleto de esos de los testigos de Jehová, sólo que te intenta convertir al ateísmo (aunque por lo menos lo admite). A veces creo que le falta un poco de humildad, cree que los ateos son superiores intelectualmente y que él está por encima de la «ignorancia», pero luego te da argumentos de por qué piensa así y te termina convenciendo aunque siga sonando pedante.
Para navidad mis padres me van a regalar…LIBROS!! Así que el problema de conseguir uno de Feynman se los paso a ellos jejeje. Recomiendas uno para empezar (de los de divulgación pregunto, los otros no pienso leerlos aún) o da igual el Esta ud de broma, Ojala lo supiera, El arco iris, Que te importa lo que piensen los demas, etc??
El día 11 de diciembre de 2008 a las 17:14
A mi Jared Diamond no me parece muy alla. He leido el colapso, y ¿Por que es divertido el sexo?, y peca de simplista y poco original. El colapso gira en torno a la sostenibilidad de los recursos, observando bajo el prisma medioambiental la caida de algunas civilizaciones (Por eso pone como ejemplos aquellas en que los factores ambientales fueron los decisivos y casi factores puros) o algunos problemas a los que se enfrentan sociedades modernas (Por ejemplo las matanzas de Ruanda). Quien se espere un libro complejo con multitud de factores o sobre la «dinamica de sistemas complejos» que se olvide, el centro de su interes son los problemas medioambientales asociados a la demanda de la poblacion de recursos: erosion, deforestacion,…etc. Reconoce y menciona otros factores, sobre todo en el caso de Montana o Ruanda, pero para el lo que prima es el enfoque destinado a la perspectiva de la explotacion medioambiental. Es interesante por lo detallado de los datos y su claridad en cosas como la alimentacion de los noruegos en Groenlandia o de los habitantes de la Isla de Pascua, por enterarse de que los conejos tuvieron que ser introducidos cuatro veces antes de colonizar Australia, pero sigue siendo un ensayo de opinion, no de divulgacion cientifica.
El ¿Porque es divertido el sexo? si que es mas divulgativo. Es mas o menos un resumen de los analisis clasicos sobre la particular estrategia reproductiva humana, tiene poco que rascar para quien sepa algo del tema.
Cambiando de tema, Gould es interesante pero con reservas, es mucho mas interesante al principio que al final. Sus ultimas recopilaciones de articulos apenas tratan los temas cientificos mas que de refilon, nada que ver con sus primeras recopilaciones. Lo mejor y lo peor de Gould es su perspectiva humanista, es mejor señalando los prejuicios de los demas, que dandose cuenta de los suyos propios.
El día 11 de diciembre de 2008 a las 17:17
Por cierto, Gould no solo tiene libros de recopilaciones, la vida maravillosa, la falsa meddia del hombre, ciencia vs religion o La grandeza de la vida, son libros monograficos sobre un tema.
El día 12 de diciembre de 2008 a las 03:52
Muchas gracias a todos por las aportaciones, que voy siguiendo; no lo dudéis.
Bernardo Rivero: He leído ese libro y está muy bien. La parte de los Bernoulli es formidable.
Dicanri: Sin pensármelo dos veces: los Está Ud de broma y Qué te importa lo que piensen los demás. Imprescindibles. En tercer lugar, el Arco Iris de Feynman.
En mi opinión son mejores estos que los de divulgación pura y dura. Es mejor pillarlos con algo de conocimiento para poder tener un criterio propio a la hora de leerlos. El de los Códigos Secretos de Simon Singh también es muy muy bueno. Tienes cuatro para pedir a los Reyes 🙂
Respecto el libro de Dawkins, a medida que te adentras en el libro se va tornando más interesante.
Salud!
El día 12 de diciembre de 2008 a las 18:39
Marfil, me he comprado el de «Germenes» preparate para un capón o un abrazo telepático ^^
Omaled, me he encargado los dos de freyman, solo espero que esten la mitad de bien que dices y con eso los disfrutaré muuuuuuuuuucho.
Un abrazop pa toos Nachop
El día 14 de diciembre de 2008 a las 02:17
Oh no, cuanta responsabilidad! 😮 En realidad espero que te guste Nachop, si no siempre me puedes comentar por qué no te gustó. 😉
El día 25 de diciembre de 2008 a las 11:34
El papá Noel ya me ha traído «Antes de Hiroshima»!!! 😉
En fin, que nunca es mal momento para desear a todos felicidad, pero en estas fiestas sucede que es más común hacerlo. Felicidades a todos los lectores, comentaristas y por supuesto al autor de Historias de la Ciencia. Brindo por muchos años más de este blog.
Un saludo.
El día 25 de diciembre de 2008 a las 13:23
Bien, me alegra fomentar los libros de ciencia y que disfrutéis con ellos.
Felices Fiestas a todos.
Salud!
El día 29 de diciembre de 2008 a las 14:10
Omalaled y resto de lectores!!
Felices fiestas y año 2009
Quisiera felicitarte por publicar esta lista de libros. Con las primeras listas de Remo en CPI (Todos los de Sagan, «Esta usted de broma….», «Si esto es un hombre», «Breve historia de casi todo») comencé a leer sobre ciencia y luego seguí con tus articulos para acabar siendo un enamorado del tema.
De esta -tu- lista tengo para leer «El cientifico curioso» y «Antes de Hiroshima» que me recomendo hace no mucho mi hermano mayor y que encontré en una feria de libros que hubo recientemente aqui en Santander. Claro está, primero tengo que terminarme los Relatos de Asimov….
Y como no, quisiera aprovechar para ofrecerme las veces que haga falta como traductor (si no aparece otro mejor antes).
Saludos a todos!
El día 29 de diciembre de 2008 a las 14:15
Vaya, quisiera aclarar que «Si esto es un hombre» no trata directamente sobre ciencia, sino que fue escrito por Primo Levi (quimico en una factoria italiana) recordando su paso por Auswitchz, todo esto bajo una vision bastante cientifica y esceptica.
Me gusto mucho y le debo la recomendacion a Remo…
El día 5 de enero de 2009 a las 18:16
Solo un detalle: Bryan May estuvo (no sé si incluso terminó su tesis doctoral) en el Instituto Astrofísico de Canarias (Tenerife). Un buen amigo mío, compañero de estudios de teleco en Madrid y actualmente trabajador del Instituto, tuvo contacto con él durante su estancia allí. Creo que llegaron a intercambiar sesiones de guitarra, de la que mi amigo es aficionado.
Yo no tenía ni idea de su faceta científica.
Saludos y feliz año nuevo.